Fuerte caída en Wall Street por la crisis de la empresa china Evergrande
Por la inestabilidad de uno de los mayores grupos privados de China y con la caída de los mercados del Lejano Oriente y Europa, las bolsas neoyorquinas abrieron la semana con un fuerte retroceso.
Las bolsas neoyorquinas abrieron la semana con un fuerte retroceso luego de conocerse la crisis financiera del gigante inmobiliario chino Evergrande, los temores de los inversores a un aumento de impuestos corporativos, la falta de acuerdo sobre un mayor endeudamiento de la Casa Blanca y a la espera de nuevas señales por parte de la Reserva Federal.
El índice industrial Dow Jones cayó 1,8%, el indicador ampliado S&P 500 bajó 1,7% mientras que el tecnológico Nasdaq se desmoronó 2,2%, de acuerdo con datos proporcionados por el New York Stock Exchange (NYSE).
El mercado amaneció con la noticia de la crisis de Evergrande en China y con la caída de los mercados del Lejano Oriente y Europa que se destacaron por una masiva y agresiva liquidación de acciones.
A lo que se sumó la advertencia de la secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Janet Yellen, sobre la necesidad de aprobar un nuevo límite al endeudamiento, lo que encendió las luces de alerta en los pasillos de Wall Street.
Yellen dijo el domingo que "el Congreso ha elevado o suspendido el techo de la deuda del país unas 80 veces desde 1960. Ahora debe hacerlo de nuevo. De lo contrario, en algún momento de octubre (es imposible predecir con precisión cuándo) el saldo de caja del Departamento del Tesoro caerá a un nivel insuficiente y el gobierno federal no podrá pagar sus facturas. Los Estados Unidos siempre han pagado sus facturas a tiempo, pero el consenso abrumador entre los economistas y los funcionarios del Tesoro de ambas partes es que no elevar el límite de la deuda produciría una catástrofe económica generalizada".
Las preocupaciones sobre los promotores inmobiliarios chinos dominaron la escena desde temprano. El temor es que un colapso potencial allí podría enviar una reacción en cadena a través de la industria de desarrollo inmobiliario chino y extenderse al sistema financiero en general, similar a la crisis de Lehman Brothers de 2008.
Muchos inversores y analistas ven en el caso chino una situación similar a la de Fannie Mae y Freddie Mac en los Estados Unidos, entidades financieras que garantizan la mayor parte de las hipotecas. Históricamente eran compañías privadas que operaban con el permiso del gobierno y bajo su reglamentación.
Los bancos también registraron grandes pérdidas debido a la baja de los rendimientos de los títulos públicos donde el Bono del Tesoro a 10 años cayó a 1,31% desde 1,37% del viernes por la noche.
Fuente, Télam