La decisión se da en el marco del acuerdo alcanzado entre las petroleras y el Gobierno, por el que los combustibles forman parte del programa Precios Justos y pueden aumentar en marzo ese porcentaje.
El gobierno busca homogeneizar todos los acuerdos que fue conformando con distintos rubros en uno solo con mismo inicio, fin y pauta de aumento mensual.
De esta forma, la dependencia a cargo de Matías Tombolini apunta a fortalecer la política de precios de referencia, una de las herramientas que eligió el gobierno para contener la inflación sobre un conjunto de bienes de primera necesidad.
La Federación Argentina de Supermercados (FASA), que nuclea a empresas del interior, expresó su rechazo a la decisión del Gobierno de pedir a gremialistas y piqueteros que asistan en el control del cumplimiento del programa.
Así lo comunicó el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, a través de sus redes sociales en referencia a la tarea del sindicato Camioneros y las organizaciones Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa y el Movimiento Evita.
"¿Realmente creen que se combate la inflación metiendo a los patoteros de Moyano en los supermercados? La inflación se combate dejando de imprimir billetes y reduciendo el gasto público innecesario", recalcó la ex ministra de Seguridad.
El Ministerio conducido por Sergio Massa implementó distintos programas tendientes a estabilizar las variables macroeconómicas: negociaciones con el FMI, pago de deuda, Precios Justos y dólar soja, entre otros.
Confluyeron una serie de medidas entre las que se destacan la implementación del programa Precios Justos y la suspensión de la emisión para financiar el déficit del Tesoro Nacional producto de una reducción del déficit fiscal.
Elministro de Economía, junto al secretario de Comercio, Matías Tombolini, se reunió con representantes de empresas, supermercados y mayoristas
para garantizar el abastecimientos y valores del programa de "Precios Justos", según informó el Palacio de Hacienda.
Lo anunció Sergio Massa tras un acuerdo con petroleras. El acuerdo contempla que no podrán aumentar más de un cuatro por ciento en el cuatrimestre y que irán descendiendo hasta el 3,50 por ciento.
La medida incluye la fijación de los valores de 1.400 productos por cuatro meses, en los que no podrán aumentar más del 4%.
Participan más de 100 empresas que representan el 86% del mercado entre productos asociados a la canasta básica.